viernes, 7 de diciembre de 2012

Nuevos nichos de mercado (D.E.P. Parador y Autovía)

Por Koke González

¡Qué mal está esto del empleo! Aún así, y sin que sirva de precedente, les confesaré un par de ideas para salir de la crisis. Dicen que en el medio rural no hay futuro, y mucho menos en el medio rural del suroccidente asturiano. Eso es un mito. Lo que pasa es que hay que amoldarse a las circunstancias del momento. Lo que falta es tener la idea. Y el Partido Popular nos ha dado la base donde forjar nuestra fortuna personal. Pero no lo comenten demasiado alto, si quieren ser los primeros en copar el mercado.
A lo que íbamos. El negocio del siglo en lugares como Cangas del Narcea, Degaña, Ibias, Allande o Tineo está en las tiendas de complementos, pero no de cualquier tipo de complemento, no. Pañuelos. Hay que llenar los escaparates con pañuelos de todo tipo y color: blancos, negros, azules, rojos, verdes, grandes, medianos, pequeños, con puntilla, con bordados, a cuadros, a rayas, de algodón, de seda,… el caso es que cada cual tenga donde elegir su favorito, porque todos van a querer tener desde uno hasta una colección completa.
Ya les digo que el frío no tiene nada que ver con el auge del negocio. Es el PP el que ha abierto el melón de la oportunidad empresarial. Qué mejor forma que anunciar que en 2013 se abrirá el Parador de Corias, y poco tiempo después anunciar un ERE que dejará en la calle a 644 trabajadores, el cierre definitivo de 7 establecimientos y de forma parcial otros 27. Con todo esto, a Corias lo que llegará en 2013 no es un Parador sino una Parada Nacional. Así que cangueses, degañeses, tienetenses, ibienses y allandeses, suroccidentales todos, ya podéis ir pasando por el negocio pañolero de vuestro vecino emprendedor a comprar un buen cargamento de pañuelos para acudir a la plaza de Corias y despedir a nuestro Mr. Marshall particular. Si quieren sacar partido a su compra, también pueden ir hasta La Espina, el túnel del Rañadoiro o la vía privada de Valdeprados, porque la autovía La Espina-Ponferrada, si algún día estuvo viva, que lo dudo, definitivamente ha pasado a mejor vida.
Y como en todas partes hay gente optimista, ahí va la segunda idea de negocio que abarca este nicho de mercado: un taller-tienda de sillas. Siempre es más cómodo esperar sentado.

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