Hallados 14 lazos en una zona osera de Cangas del Narcea
Los furtivos capturaron varios jabalíes con las trampas
La patrulla de la Fundación retira las trampas. FOP
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El furtivismo continúa arraigado en algunas zonas de Asturias. La Fundación Oso Pardo (FOP) localizó 14 lazos ilegales en una zona osera de Cangas del Narcea. La patrulla encontró las trampas de acero en un bosque de castaños de la zona del río Naviego, en el parque natural de Fuentes de Nacerca, Degaña e Ibias, una zona en la que conviven ejemplares de osos. Aunque no se encontró ningún daño en su población, sí es cierto que los técnicos localizaron esbardos cerca de los lazos. Los osos muerden, arañan y se restriegan en los árboles y, donde los furtivos tenían colocadas las trampas, la patrulla encontró arañazos y mordiscos.
Aunque en esta ocasión los cazadores no lograron capturar osos, los técnicos de la fundación constataron que, al menos, en cinco zonas, habían atrapado jabalíes. Nada más detectar estos 14 lazos, la patrulla lo comunicó al Seprona y eliminó las 14 trampas.
Según las primeras investigaciones, los lazos estaban en el mismo bosque con lo que entienden que fueron colocados por un solo furtivo. Por este motivo insisten en la importancia de no bajar la guardia pese a que, año a año, desciende el número de lazos colocados en los montes asturianos.
Normalmente los furtivos buscan jabalíes, corzos o ciervos aunque, la presencia de otros animales en los bosques, como los osos, pone en serio peligro estas especies en peligro de extinción. El uso de lazos de acero está tipificado como delito y conlleva penas de cárcel de 14 a 24 meses (si no tiene antecedentes se puede conmutar por una multa), además de la inhabilitación para cazar durante dos a cuatro años.
Desde 1993, la Fundación Oso Pardo ha localizado y retirado 1.504 lazos en la cordillera y ha denunciado a 18 tramperos que fueron sorprendidos mientras colocaban o revisaban los lazos (cinco de ellos en Asturias).
Esta misma semana, una patrulla de la Guardia Civil de Pola de Lena ha detenido en Mieres a un vecino de la localidad de Morcín, R. M. F., como supuesto autor de un delito contra la flora y la fauna por colocar lazos de acero para la caza.
Aunque en esta ocasión los cazadores no lograron capturar osos, los técnicos de la fundación constataron que, al menos, en cinco zonas, habían atrapado jabalíes. Nada más detectar estos 14 lazos, la patrulla lo comunicó al Seprona y eliminó las 14 trampas.
Según las primeras investigaciones, los lazos estaban en el mismo bosque con lo que entienden que fueron colocados por un solo furtivo. Por este motivo insisten en la importancia de no bajar la guardia pese a que, año a año, desciende el número de lazos colocados en los montes asturianos.
Normalmente los furtivos buscan jabalíes, corzos o ciervos aunque, la presencia de otros animales en los bosques, como los osos, pone en serio peligro estas especies en peligro de extinción. El uso de lazos de acero está tipificado como delito y conlleva penas de cárcel de 14 a 24 meses (si no tiene antecedentes se puede conmutar por una multa), además de la inhabilitación para cazar durante dos a cuatro años.
Desde 1993, la Fundación Oso Pardo ha localizado y retirado 1.504 lazos en la cordillera y ha denunciado a 18 tramperos que fueron sorprendidos mientras colocaban o revisaban los lazos (cinco de ellos en Asturias).
Esta misma semana, una patrulla de la Guardia Civil de Pola de Lena ha detenido en Mieres a un vecino de la localidad de Morcín, R. M. F., como supuesto autor de un delito contra la flora y la fauna por colocar lazos de acero para la caza.
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