"No sabíamos de qué nos estaba hablando" comenta un asistente a las charlas sobre los caldos cangueses. Así de estupefactos se mostraron los alumnos que asistían a un curso avanzado de cata de vino organizado en Cangas del Narcea. El detonante de semejante estupor no fue otra cosa que la terminología empleada por el profesor, el experto vitivinícola, Pedro Picudo Suviñón. Y es que durante los tres días que duró el curso, el señor Picudo no empleó ni una sola vez las palabras terruño, sotobosque, frutos del bosque o melocotón. Habló de unos frutos llamados uvas "y se atrevió a decir que los vinos de Cangas saben a ellos", así se expresaba un indignado alumno y propietario de viñedos en un formal de los más ricos y soleados de la zona. "Yo por un momento pensé que me había equivocado de curso", relata para Paladas de Humor otro de los asistentes.
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| Frutos no aptos para elaborar vino, según P. Picudo Suviñón |
Tras las tesis expuestas en el curso, la junta directiva de la IGP se planteaba descepar todo el terreno acogido a la Indicación, a los que tuvo que disuadir el propio Pedro Picudo mostrándoles fotografías de uvas, haciéndoles ver que eran similares a las carrasquinas, albarinas, mencías...que ellos cultivan, pero que nada tenían que ver con otras especies. Para que no vuelvan a repetirse los errores, el señor Picudo Suviñón se ha comprometido a enviar varias instantáneas de grosellas, fresas y cerezas, "con las que se realizan excepcionales mermeladas y maceran muy bien en orujo", pero que aún nadie ha sido capaz de elaborar vino ni bueno ni malo.
(Esta noticia es ficticia, elaborada para Paladas de Humor. Cualquier parecido con la realidad es pura coincidencia).
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